Tras ese impacto inicial, el negro se volvió a recuperar eventualmente y actualmente, los partidos auspiciados por FIFA permiten que los árbitros lleven cinco colores: negro, rojo, verde, amarillo y azul, siempre con pantalón y medias negras, aunque en competiciones como la Serie A italiana, los árbitros pueden vestir las tres piezas de su uniforme con un llamativo color amarillo fluorescente. Cabe destacar una innovación en la primera equipación durante la temporada 2016-17, en la que vistió una camiseta blanca hecha con plástico reciclado de desechos encontrados en las costas de las Maldivas, en el Océano Índico.