Debido a esto, el Ministerio Público solicitó la reapertura del juicio que se llevó contra Herrera por el atropello de 2009, lo que fue acogido por el tribunal que revocó la suspensión condicional del procedimiento. El 21 de junio de 2013 Herrera fue encontrado culpable por cuasidelito de homicidio, ya que a juicio del tribunal el jugador conducía a exceso de velocidad y desatento a las condiciones del tránsito. Vuelve a tocar el balón con las manos después de haberlo puesto en juego y sin que cualquier otro jugador lo haya tocado.